Thursday, April 01, 2010

en honor a el gran pez... No me refiero a Sabina

Y desafiando el oleaje sin timón ni timonel, por mis sueños va, ligero de equipaje, sobre un cascarón de nuez, mi corazón de viaje, luciendo los tatuajes de un pasado bucanero, de un velero al abordaje, de un no te quiero querer. Y cómo huir cuando no quedan islas para naufragar al país donde los sabios se retiran del agravio de buscar labios que sacan de quicio, mentiras que ganan juicios tan sumarios que envilecen el cristal de los acuarios de los peces de ciudad que mordieron el anzuelo, que bucean a ras del suelo, que no merecen nadar.

nuevamente de naranjas medias

Desperté un día sin sus mimos, sin sus besos, tenia frió mi piel y lo extrañe... menon decidió irse de mi lado. Dicen que nada es para siempre, difícil aceptar el dicho. Una noche de noviembre llego con desicion, transcurrieron días agradables que aminoraron mi monótona soledad en Polvorones ( Donde hago mi servicio social) y luego retomo su antiguo camino.